Todos podemos tener manías pero convertir estas en ritos totalmente fuera de nuestro control puede llevarnos a situaciones contraproducentes o incluso peligrosas. Podemos identificar si sufrimos este tipo de trastornos y solucionarlos con la ayuda del psicólogo/a clínico.
El Trastorno obsesivo-compulsivo se caracteriza por obsesiones (que causan ansiedad
y malestar significativos) y/o compulsiones (cuyo propósito es neutralizar
dicha ansiedad).
Ejemplo de obsesiones pueden ser: miedo a contaminarse, a dañar a seres
queridos... Ejemplo de compulsiones y/o rituales son: tocar madera, colocar
y/u ordenar,
lavarse las manos